Preguntale a 100 entrenadores si estirar antes de correr es necesario y obtendrás 100 respuestas distintas. El estiramiento es uno de los temas más controvertidos en el ámbito deportivo y aunque muchos juran y recontrajuran que es necesario, estudios recientes sugieren lo contrario.
Quizás vos seás uno de esos que no se atreve a dar un solo paso sin antes haber estirado. Tal vez no sepás qué estás estirando ni por qué, pero lo hacés simplemente porque desde la escuela el profesor de educación física te obligaba y te quedaste con la costumbre, o bien porque ves a todo el mundo haciéndolo.
Aunque no hay una verdad absoluta al respecto, dos hallazgos recientes nos ponen a pensar acerca de los “beneficios” del estiramiento:
1. Estirar antes de correr NO previene lesiones. Tampoco las causa, pero si no las previene, ¿para qué estiramos? Este estudio involucró a casi 1400 corredores distribuidos al azar en dos grupos, uno que cumplía una rutina de estiramiento estático que duraba unos 5 minutos, y otro que no estiraba del todo. Todos siguieron su entrenamiento normal de correr durante los tres meses que duró el estudio. Al final ambos grupos tuvieron el mismo porcentaje de atletas lesionados (16%), es decir, que el grupo que estiró no obtuvo mayores beneficios en cuanto a prevención de lesiones. Los hallazgos de este estudio no son nuevos ni atípicos, la mayoría de investigaciones no logra demostrar que el estiramiento previene lesiones.
2. La flexibilidad puede perjudicar el rendimiento. Este estudio de la Universidad de Nebraska midió la flexibilidad de sus corredores y la correlacionó con sus tiempos en 10k y su economía de carrera (cuanto oxígeno se consume corriendo a una velocidad determinada). Los resultados fueron contundentes: los atletas más flexibles tenían peor economía de carrera que los más “rígidos” (tiesos diríamos en CR). Los menos flexibles además tenían mejores tiempos en 10k. Esto se debe a que cierta rigidez permite mayor almacenamiento y uso de la energía elástica en cada paso. Es como si nuestras piernas fueran un resorte: si son rígidas rebotaremos más con cada paso (y por ende avanzaremos más). En otras palabras, cierta rigidez hace que correr sea más fácil. Los resultados fueron iguales entre hombres, entre mujeres y entre hombres y mujeres; siempre los menos flexibles tenían mejor economía de carrera.
¡No estamos diciendo que no estirés! Solo estamos diciendo que no debe ser una regla. De hecho, en el estudio antes mencionado se encontró que las personas que están acostumbradas a estirar siempre y llevan haciéndolo durante años no deben cambiar abruptamente a no estirar, pues un 23% de quienes solían estirar y dejaron de hacerlo se lesionaron (comparado con 16% como promedio en el grupo). Los investigadores concluyeron que un cambio abrupto en los hábitos de estiramiento aumenta el riesgo de lesión.
¿Confundido? Bueno es que el tema se las trae y cada quien tiene su versión, mientras unos defienden el estiramiento a muerte otros dicen que no es para nada necesario. En pocas palabras podemos sugerirte lo siguiente: